lunes, 31 de diciembre de 2007

"¡ Matriculé, hijo mío !"

Con ésta frase me saludó mi padre hace dos días vía telefónica desde Miramar, ciudad ubicada en el condado de Broward, Fl. USA. Hoy, cuando culmina un año más; no puedo sino reflexionar sobre ella. En el argot popular latinoamericano, dicha frase denota el alivio que siente una persona de la tercera edad, por haber podido cumplir un año más de vida. En el caso de mi papá esto viene ligado a cierta visión fatalista luego de haber sido diagnosticado de una enfermedad del higado hace tiempo que le obliga a guardar ciertas restricciones en su dieta, le provoca dolencias serias en algún momento y es tratada en base a medicamentos que no se fabrican en el país. La vida de mi "viejo" ha sido sencillamente espectacular, digna de ser reseñada en un libro y mejor resumida alegoricamente con el logo que adorna éste artículo, creo que el evento más significativo de todos (entre muchos más) fué el haber hecho la transición de empleado público a empresario de manera sumamente exitosa. Él, es parte de ese 5% de la población de tercera edad que puede respirar tranquilo en cuanto al aspecto económico y por ello me pregunto: ¿qué habría sido de él, de mi mamá y de nosotros, sus hijos, si él no hace esa transición?...Y aquí es donde quiero hacer la reflexión: a lo largo de nuestra vida tendremos oportunidad de hacer elecciones que modifican enormemente nuestro futuro, la sensatez con la que él ha manejado su vida le ha podido ayudar a prolongar su existencia: tiene acceso a medicina de clase mundial, a medicamentos de última generación y a un descanso reparador por un retiro que se ha procurado a fuerza de trabajo hábil. Muchos podrán decirme: "Bueno, yo estoy en camino de lograr lo mismo ó algo mejor"; bién, les digo que eso es muy loable; pero vuelvo y repito, las estadísticas son claras: sólo 5 personas de cada 100 lo logran. Si usted está entre esas 95 personas restantes, ¿no le gustaría contar con una renta vitalicia que vele por usted al llegar a ésta edad?; nosotros podemos ayudarle a tomar esa decisión que marcará su futuro.

sábado, 29 de diciembre de 2007

Hoy cumplo 65 años

En pocas horas cumpliré sesenta y cinco (65) años y me encontraré en la línea que separa la sensatez de la imprevisión; en pocas horas tendré la certeza de haber tomado la decisión correcta cuando me visitó el asociado de mi compañía (sí, también es mía) y podré acceder al ahorro que hice sistemáticamene durante años y que hoy veo concretado en una hermosa realidad. ¿Cuántas personas pueden decir esto?...las estadísticas reflejan que sólo 5 de cada 100 personas tienen un ingreso al arribar a la edad dorada. ¿Cuanto necesitaré para vivir dignamente al arribar a ésta edad? La regla general dicta que la esperanza de vida a partir de los 65 años de edad, se encuentra como mínimo en 20 años adicionales y los expertos en finanzas dictaminan que la personas necesitan tener ahorrado un mínimo de 25 veces la cantidad de dinero que estiman gastarán en su primer año luego de dejar generar ingresos; si ese primer año creemos que nuestra manutención estará alrededor de US$ 25.000 entonces la cantidad mínima a tener ahorrada es de US$ 625.000. Ahora usted tiene 3 caminos si no nació millonario ó si el patrimonio no comprometido de sus empresas no supera 25 veces el gasto de primer año: vivir en la miseria, vivir de la caridad que le puedan brindar seres queridos -ésto no es un eufemismo, usted no podrá exigir más de lo que estén en capacidad de darle- y vivir de sus ahorros (únicamente podrá contar con aproximadamente US$ 2.500 anuales provenientes de la seguridad social). ¿Usted no comenzó a ahorrar el 10% de sus ingresos desde los 25 años?....entonces tiene un poblema que tiene que resolver cuanto antes y no lo puede seguir dejando pasar puesto que cuanto más tarde comience a ahorrar, más costoso le resultará cualquier solución para ésta realidad. Los números son lo que son, y cuando están relacionados con su jubilación, ignorarlos no es una bendición. El conocimiento de ellos, por otro lado, puede ser una cosa poderosa,......solo si esto le lleva a la acción. Cualquier solución probable es solo eso, existen muchos caminos que escogemos como ciertos pero son engañosos (el valor de un apartamento que compramos para alquilar, es el costo de 30 días de terapia intensiva en cualquier clínica); ésto se debe a que nos encontramos en la etapa productiva y mientras vemos el dinero fluir siempre estaremos pensando que podemos empezar a preocuparnos más tarde. Si realmente estamos ahorrando, debemos hacer el ejercicio propuesto para saber si estamos en camino de concluir nuestra vida por la puerta grande; de lo contrario no existe una manera más segura que contactarnos, sin compromiso alguno, para planificar ésta parte de su vida; créame, tarde o temprano ésta etapa llegará y no habrá posibilidad de echar el tiempo atrás para tomar una decisión que le satisfaga.

"Nadie planea fracasar, pero muchos fracasan al planear"

viernes, 28 de diciembre de 2007

Recibiendo reconocimiento


En Cartagena de Indias recibimos un reconocimiento de parte de la empresa; la persona que nos acompaña es nada más y nada menos que el Sr. Jorge López, el gurú del seguro de vida para latinoamérica y quien formó parte de la comitiva.

jueves, 20 de diciembre de 2007

La cultura del retiro en latinoamérica

El 95% de las personas en latinoamérica postergan decisiones claves en sus vidas cuando de ahorrar para el retiro y el futuro se trata, ¿a qué se debe éste comportamiento?:
  • "El dinero no me alcanza"; tal excusa es increible, puesto que en muchas oportunidades dejamos de comprar comida por cancelar el giro del vehículo último modelo que tenemos aparcado.
  • "Dios proveerá!"; si la persona en cuestión tuviera la oportunidad de viajar al futuro y poder regresar en un instante, estoy completamente seguro que haría algo al respecto, al ver que "Dios" es un concepto religioso y la realidad es sumamente más cruda de la que él ó ella pensaba.
  • "Comienzo más adelante"; alguien calculó que las personas tienen que ahorrar el 10% de lo que ganan a partir de los 25 años si quiere retirarse a los 65 años sin problemas, la mayoría de las veces a ésta edad en latinoamérica, no se tiene la capacidad de ahorro necesaria para afrontar un plan; si ésto es así, ¿cuanto tiempo vas a esperar antes de tener que invertir muchísimo más en alternativas no seguras?
  • "Si me voy, los de atrás que arréen!"; una vez recibí ésta afirmación (más común de lo que usted cree)...ok...eso lo dice un irresponsable, pero más allá de eso, el problema no es el que se vá, la factura la pagan los que quedan y eso me parece inhumano, pues entonces es mejor que éste individuo esté sólo.
  • "No voy a dejar dinero al lechero!"; algo parecido a lo anterior lo he escuchado alguna vez en boca de machistas irremediables, lo que no saben éstos señores es que: una viuda sin necesidades financieras no se lo ocurre mirar a otro tipo.
  • "Prefiero los bienes inmuebles"; excelente punto de vista, pero todos necesitamos un plan "B" por si el plan "A" llegara a fallar; además si una persona posee "X" cantidad de dinero en activos, lo que ofrecemos nosotros es que a un costo mínimo, técnicamente pueda fortalecerlo en el porcentaje que mejor le parezca (¿que tal, duplicar el patrimonio?).
  • "Es muy caro"; si usted realmente tuviera la visión integral de lo caro que le está saliendo a la generación "Boomer" (aquella gente nacida antes del 59´), poder armar un plan de retiro y jubilación, lo nuestro le parecerá una ganga!

Afortunadamente éste comportamiento y algunas otras excusas se estrellan ante una realidad ineludible: el llegar a viejos y morir es algo inherente a la condición humana y por ello las nuevas generaciones están protagonizando sus vidas y no dejan al azar -con "soluciones probables" a problemas ciertos- el futuro que tan fervientemente desean obtener para sí.

"No espere más, protagonice su vida"

viernes, 14 de diciembre de 2007

La jubilación y el seguro de vida

El transitar en la vida nos impone ciertas realidades y responsabilidades que no podemos eludir; una de ellas es la preocupación sobre nuestros ingresos cuando llega la edad dorada; en la mayoría de los países del mundo los sistemas de seguridad social están colapsando, ello se debe a que la humanidad entera ha disminuido la cantidad de hijos que las parejas están dispuestas a mantener, en los tiempos de antes no era raro que los matrimonios concibieran al menos cuatro descendientes, hoy día -acaso- están dispuestos a traer al mundo dos ó uno, ésta realidad ha hecho que, mientras en los tiempos de nuestros padres habían seis ó mas hermanos cotizando a la seguridad social, apenas hoy un sola persona se encuentra cotizando para mantener a ambos padres, por lo que el dinero que ingresa a la seguridad social es demasiado poco y los estados han tenido que subvencionar el déficit; sin embargo, la situación tendrá alguna vez un límite y por ello los países están cada vez menos dispuestos a financiar tal déficit, de ello deriva la reducción de las pensiones sociales de vejez a escala mundial.
Por otro lado y más específicamente en los países del tercer mundo, el ahorro sistemático no es un valor que inculcamos a nuestros hijos, ello genera serias distorsiones a la hora de enfrentar el retiro, puesto que para el 95% de las personas, su prioridad no ha sido tener planeada su jubilación y las encontramos pasando muchas necesidades en la tercera edad ó dependiendo de terceros, cuando podrían haberlo evitado.
Otra realidad es la que acosan a las personas productoras de dinero dentro de su núcleo familiar, las estadísticas son claras: 16 de cada 100 personas morirán en un accidente o de causa natural antes de los 65 años y habría que reflexionar sobre que pasaría con su familia ó seres queridos que dependen del "proveedor" de su status de vida.
Un producto cómo el que ofrecemos es la solución a ésta problemática, puesto que las características únicas que lo separan de la competencia son:
  1. Interesantes productos con beneficios vitalicios en dólares americanos (US$)
  2. Las tarifas más bajas que las de empresas extranjeras de tu localidad
  3. Atención personalizada y en tu idioma natural
  4. Protección contra la inflación al llevar tu patrimonio a una moneda "dura"
  5. Protección contra la devaluación de nuestro signo monetario
  6. Transferencia de capital a un sitio amparado por agencias federales
  7. Pólizas que te garantizan un ingreso vitalicio
  8. Protección para tus seres queridos en caso de muerte
  9. Protección en caso de enfermedad terminal declarada y desmembramiento accidental
  10. En caso de una incapacidad de 6 meses ó más, no pagarás ninguna de las primas anuales restantes y recibirá, de todas formas, tu ingreso por jubilación inalterado
  11. Pólizas con una característica de patrimonio único
  12. Ganancias sobre acumulación de efectivo libres de impuestos sobre la renta y sucesorales
  13. Un seguro de vida que te paga por vivir
  14. Ingreso mensual para los seres queridos en la eventualidad de tu muerte
  15. Singulares opciones sobre cesiones o cambios de propiedad


Hace 5 años que me hice cliente de CITIZENS Financial Group y la extraordinaria labor que hace la empresa me motivó -dos años atrás- a dar un gran paso como es el de representar tan maravilloso producto, a veces me pregunto: ¿por qué las personas no están haciendo cola en las compañías de seguro para adquirir tales instrumentos, ante la certeza de que existen dos verdades meridianas inherentes a la condición humana: llegamos a viejos ó morimos?, pues ésta semana he llegado a una conclusión: mi profesión es necesaria y por ello, me encanta!

"Si te ocupas de tu futuro, el futuro se encargará de ti"

martes, 17 de julio de 2007

La necesidad de las anualidades.


Tres de cada cinco compañías en los Estados Unidos (EE.UU) declararon que la mayoría de sus empleados no están preparados financieramente para el momento del retiro. Según la encuesta de Aon llamada “talento y beneficios 2.007” aplicada en más de 2.000 firmas norteamericanas, el 62% de éstas organizaciones anticipa que más de la mitad de sus empleados no tendrá renta de retiro cuando dejen de trabajar entre los 62 y 65 años.

Una de los factores más significativos que ha contribuido a ésta situación es el cambio de los trabajadores desde planes definidos de retiro por las empresas (los cuáles han sido reducidos ó abandonados por éstas) a la gerencia del dinero producido en beneficios para el retiro de los empleados, que ha pasado a ser de absoluta responsabilidad de éstos. El problema es que los empleados tienen poca ó ninguna idea en como invertir sus activos, según definieron el 80% de las empresas encuestadas.

Tal dificultad es reflejada en el estudio de investigación del inversionista llamado “América habla sobre el retiro” año 2.007 hecho por la empresa AIG SunAmerica. La encuesta demuestra que el 44% de la generación “Boomer” (aquellas personas que tienen entre 45 y 60 años de edad) y que planean retirarse entre los 62 y 65 años no tienen asegurado el ingreso vitalicio y no lo habrían considerado como meta en sus años productivos. Muchos admitieron que no tienen un plan de ingresos para los próximos 30 años cuando dejen de formar parte de la fuerza productiva.

Mientras que los “Boomers” son reconocidos generalmente como personas gastadoras y no ahorradoras, la encuesta reveló que casi todos ellos - ocho de cada diez encuestados – consideraron los ingresos vitalicios como muy ó extremadamente importantes.

Los expertos en la generación “Boomer” expresan la misma inquietud: los americanos que hacen frente a su retiro en los próximos 30 años se están sintiendo impotentes sobre su futuro y buscan desesperadamente información sobre cómo deben invertir y proteger sus ahorros de retiro mientras están aún productivos y convertirlos en renta vitalicia en ciernes.

Los expertos dicen que las anualidades han sido desarrolladas para convertirse en una de las soluciones para conseguir una renta de retiro que los americanos desean y necesitan. A diferencia de sus predecesores (planes de retiro tradicionales), las anualidades garantizan una renta vitalicia a la hora del retiro, tienen el potencial para el crecimiento de la inversión y la seguridad de un riesgo de mercado de bajo nivel, las tres preocupaciones principales de los boomers.

Pero la nueva generación de estos instrumentos tiene características que antes no existían, las anualidades variables –por ejemplo- pueden tener rendimientos incluso superiores a las anualidades fijas (entre un 5% y 6%), pero también los beneficios están sujetos a las condiciones de altas o bajas del mercado y eso puede influir en la cantidad que se recibe como renta vitalicia.

Las anualidades también pueden ayudar a desaparecer el miedo común que existe dentro de la ecuación del inversionista, en la encuesta referida un 96% de los “boomers” reportaron pérdidas en sus inversiones y otro estudio conducido por Mathew Greenwald y asociados, demostró como el miedo afecta las decisiones de inversión de la gente.

El 56% de los encuestados dijeron que el riesgo es la razón que más limita la decisión de inversión en acciones, el 26% reconocen que sus inversiones son demasiado conservadoras debido al riesgo potencial, el 44% desean poco ó nada de riesgo lo que deriva en ganancias más bajas y el 32% de los encuestados se sintieron muy inseguros si sus inversiones perdían más del 2% anual.

La garantía de renta vitalicia que ofrecen las anualidades le da confianza a la gente para invertir en estos instrumentos dijo la asociación nacional para soluciones de retiro (NAVA por sus siglas en inglés). Aparte de la renta vitalicia, las anualidades protegen a las familias en caso de muerte del aportante, aumentan la indemnización en caso de muerte accidental y garantizan beneficios más altos cuanto más personas se integren al sistema.

Finalmente hay dos aspectos a resaltar del estudio “América habla sobre el retiro” año 2.007:

- 66% de los encuestados estuvieron dispuestos a invertir en instrumentos financieros que garanticen una renta mensual vitalicia.
- 50% tienen interés en retirar sus inversiones conservadoras y llevarlas a un plan de retiro por anualidades.

Las anualidades se están convirtiendo rápidamente en el producto financiero por excelencia en el momento adecuado y por las razones convenientes, de hecho, los analistas financieros predicen que la industria del seguro puede experimentar el boom más gigantesco de su historia.



(publicado por InsuranceNewsNet, INC.)

martes, 19 de junio de 2007

A cualquiera le puede suceder, ¿estás preparado?

De seguro que el peatón que se observa en el vídeo, jamás pensó,

en la mañana, al salir de casa, que nunca regresaría.... piénsalo....

martes, 20 de marzo de 2007

Anualidades: Un seguro para tu jubilación

Hoy en día que las pensiones vitalicias para los jubilados parecieran ser una bonanza del pasado y que cada vez se habla más de la “inseguridad” de los servicios de seguridad social, muchas personas ven como alternativa para asegurarse una vejez tranquila el poder crearse su propia pensión vitalicia.
A grandes rasgos, las anualidades son contratos establecidos con una compañía de seguros que convierten una inversión inicial (contribuciones) en un ingreso mensual garantizado de por vida (o en su defecto por un período determinado de años) pagadero por la empresa aseguradora al beneficiario del producto – el pensionado o anualizador - o a sus asignados o herederos.
Por lo tanto, lo que este instrumento permite es que una persona independiente, sin tener que trabajar para una empresa especial que ofrezca estos planes, pueda hacerse una anualidad y asegurarse que en un punto futuro recibirá los frutos de esa inversión en la forma de pagos de por vida (vitalicios).
Así que para hacerte tu propia pensión vitalicia lo que necesitas es aprender cómo funciona una anualidad y que tipo de anualidad se adapta mejor a tus necesidades. Por supuesto que los detalles de cada anualidad dependerán de los productos específicos de la empresa emisora – la compañía de seguros - pero también está determinada por las leyes estatales de seguros y por ciertos requisitos fiscales federales (es decir, ciertas reglas de impuestos del Departamento de Rentas Internas -IRS), estas reglas no afectan a las personas residenciadas fuera de los Estados Unidos.
La inversión inicial en una anualidad puede ser aportada de un solo golpe o en porciones mensuales durante un período de tiempo determinado que se conoce como el período de acumulación. Luego, y según las condiciones del contrato, en un momento definido comienza el período de recuperación de lo invertido (más las ganancias acumuladas) o período de anualización. Cuando se aporta dinero a la cuenta, se hace una contribución y en el momento de retirar dinero se hace una distribución.
La forma como la empresa de seguros puede garantizar que el dinero acumulado en el instrumento alcanzará para hacer pagos mientras el dueño de la anualidad viva, es porque se basan en tablas estadísticas o actuariales que les permiten “predecir” cuantos años vivirá una persona y cuánto dinero deberá distribuirse de lo acumulado, según esos cálculos.
Claro está que el período de acumulación no es otra cosa que para recolectar fondos con los que generar ganancias (intereses, dividendos, etc.) así que la empresa de seguros necesitará poner esos fondos a producir. Tú como dueño de la inversión puedes definir en qué instrumentos se invertirán los fondos: en instrumentos fijos o en instrumentos de renta variable como acciones o fondos de acciones. Una anualidad fija, por lo general es un contrato que establece que el rendimiento mínimo de la inversión está garantizado por la compañía de seguros emisora y que será de “X”% cada año. Pero si el instrumento de inversión es de renta variable, o inversión bursátil, entonces estaremos ante una anualidad variable.
Cuando decidas que tipo de inversión quieres para tu anualidad debes recordar que si eliges una renta fija estás limitando el ingreso a un porcentaje específico que puede frenar el crecimiento de tus inversiones y no producirte el crecimiento que necesites.
Si decides invertir en una anualidad variable entonces correrás los riesgos de cualquier inversión bursátil: estás expuesto a los altibajos de la bolsa y sus riesgos de perderlo todo, así como también, puedes tener mucho más rendimiento que si lo colocaras en inversiones fijas.
Las anualidades tienen muchas otras características que son intrínsecas del producto, pero tienen una ventaja: Por ser un producto de seguros escudan las inversiones contra demandas de acreedores. Es decir, el dinero acumulado en este instrumento no estará sujeto a embargos por parte de las entidades o personas a quienes les debas dinero.
Una de las ventajas de las anualidades es que puedes establecer una que te produzca una pensión mientras tú vivas y si todavía queda dinero disponible a la hora de tu fallecimiento quienes designes como tus beneficiarios recibirán el restante.
Cuando llega el período de distribución o anualización, el beneficiario decide cómo desea recibir sus pagos. La regla general es que a mayor cantidad de pagos a recibir el monto se verá reducido (a menos que elijas el ingreso mensual vitalicio, que son los intereses producidos por ese capital acumulado). El monto de cada pago mensual por los años que decidas quieres que te paguen, estará definido por cuánto has acumulado, (intereses más tus contribuciones) y la cantidad de años que recibirás el pago.
Si necesitas asegurarte que para tu retiro dispondrás de un monto particular fijo, necesitarás hacer una anualidad que te garantice un monto mínimo de distribución. Este tipo de anualidades puede requerir que compres un servicio adicional (rider) y seguramente debas pagar una prima adicional.
"El tiempo y mi dinero son el firme aliado de mi vejez"

jueves, 15 de febrero de 2007

"El milagro del seguro de vida"



¿Sabías tú que nosotros vendemos un milagro de papel y tinta? Y sin embargo, precisamente, por ser de papel y tinta, nos inclinamos a pensar solamente en el papel y a olvidar el milagro. -¿Dije: nosotros, un pedazo de papel? -Si, un pedazo de papel... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un pedazo de papel que garantiza que si los ingresos que tú produces son cercenados por la muerte prematura, tú esposa(o) tendrá seguridad y comodidades durante el resto de su vida... y así no conocerá penurias ó necesidades por el hecho de haber unido su vida a la tuya... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un pedazo de papel que garantiza que a tus hijos nada les faltará, incluyendo una adecuada educación, aún en el caso de que tú fallecieras antes de ver realizados estos anhelos que son, de hecho, tú obligación para con ellos, por el hecho de haberlos traído al mundo.... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un pedazo de papel que garantiza que cuando tus días de productividad hayan quedado atrás, tú tendrás la ayuda económica necesaria para vivir sin trabajar, lo cuál a su vez garantiza que tú esposa(o) y tú, podrán esperar sus años postreros sin temores ni preocupaciones... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un pedazo de papel que te garantiza una participación en las riquezas de este mundo -una parte de los mejores bonos, inversiones y cuentas bancarias- y una propiedad que puedes comprar a plazos y que constituye el más seguro plan económico jamás concebido por mente humana... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos una cuenta de ahorros, no solamente garantizada en cuánto a su seguridad, si no, creadora y fuera del alcance de tentaciones pueriles y, sin embargo, siempre disponible para las verdaderas emergencias… PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un papel que garantiza lo que es, quizás, el más extraordinario y peculiar convenio jamás contemplado por las leyes de tierra civilizadas, porque se trata de un contrato unilateral, uno en el que las obligaciones recaen todas en una sola de las partes. En virtud de este contrato, una gran institución financiera se obliga irrevocablemente a proporcionarte en el futuro todas esas cosas que hemos mencionado. En cambio tú no asumes obligación alguna, salvo la responsabilidad de ahorrar dinero sistemáticamente, reteniendo en todo momento el derecho a dar por terminado el convenio, mientras que la otra parte solo podría hacerlo con tú consentimiento... PERO ESO NO ES TODO.
Nosotros vendemos un pedazo de papel que garantiza todo esto y mucho más y que además establece que si tus ingresos desaparecen por una incapacidad declarada, todas estas cosas serán tuyas de todos modos, tal como si tú hubieras podido continuar con tus depósitos.
¿Un pedazo de papel y una gota de tinta? ¡NO!, UN MILAGRO DE PAPEL Y TINTA.